lunes, noviembre 06, 2006

Regresión y bastonazo

Depués de los golpes recibidos por los martillazos de Ivy, León despertó conmocionado, y a su mente llegaron recuerdos de una etapa anterior de su vida, que había quedado olvidada debido a un tremendo bastonazo.

León creyó ser de nuevo Penumbras, el consorte malvado de Oscuridad.

Salió a Bree y desplegando su inocente maldad, sacó su pequeña espada y amenazó a Earon, el capitán de la guardia de Bree. León pasó esa noche en una fría celda. Se pasó toda la noche gritando a los guardias que le dejasen hablar con Ilia, ella le sacaría de alli.

Al día siguiente, Earon encontró a Ilia en Bree, y le comentó acerca del mediano. Ilia se desentendió del todo, pero Thornil andaba por allí, y al oir la descripción, supuso que se trataba del joven León, así que acompañó a Earon a las celdas, y le prometíó hacerse cargo del hobbit, a cambio de que León pagase su deuda, con servicios a la villa.

Al salir a la calle, León vio a Ilia, y siguiendo con su personalidad actual de Penumbras, se acercó a ella, y la pidió instrucciones para desplegar el mal, llamándola Oscuridad, como si de nuevo estuvieran años atrás cuando fue Penumbras por primera vez.

Ilia se dio cuenta de lo que le ocurría a León e intentó hacerselo saber a Earon, pero a este le daba lo mismo, así que decidió ella misma, recurrir a su "cura" habitual.

Y así hizo, distrajo a Penumbras diciéndole que se fijara en el cuerpo de Ariel, la elfa, de aspecto parecido a Ilia, que trabaja para Rogo, y teniéndole de espaldas a ella, le arreó un tremendo bastonazo marca de la casa.

León estuvo inconsciente un par de horas, pero al despertar, volvía a ser el alocado y noble paladin de siempre.

Ahora, aún asi, debe pagar su pequeña deuda, ayudando en la posada a llevar las bandejas, y a ayudar al molinero a cargar con los sacos, y otras pequeñas labores, que León hace encantado de ayudar, y sin saber muy bien, por qué tiene que hacerlo...

No hay comentarios: